domingo, 3 de abril de 2011

Se hizo el silencio en su interior, cuando dejo de latir, cuando dejo de sentir, ya su persona, no perdona, pero olvida, los caminos se separan, sigue la ruta conocida, hasta que con otra coincida. Ya nada daba por vosotros, hoy soy el ventrílocuo de millones de corazones locos, (rotos) que se ahogan con el aire, y mi voz, los llena de orgullo y de pasión. Represento la emoción del primer beso, conozco la mentira, y el paso del tiempo, desconozco los motivos, y deseo tus sentimientos. Tantos, como imagines, tantos, como imágenes admires.
Enséñame lugares donde no haya números impares, y que no pares a pensar, si sienten lo mismo las paredes que protegen nuestro hogar, si la verdad es que te quiero, si mi problema es que a veces soy demasiado sincero, entre el cemento y el acero, se oye un chico sentado en la litera espera, que pase primavera, será cuando otra chica pegue a su puerta. La apariencia ya no importa, el lo soporta, y mientras las horas acortan su vida, la muerte pide paso, pero el deseo de enamorarse, le quita su descanso, para él, sin sonrisas y abrazos, y con la soledad en su camino, la existencia es un fracaso.
Pekado.
 Para escuchar la canción, click encima->

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Se hizo el silencio en su interior, cuando dejo de latir, cuando dejo de sentir, ya su persona, no perdona, pero olvida, los caminos se separan, sigue la ruta conocida, hasta que con otra coincida. Ya nada daba por vosotros, hoy soy el ventrílocuo de millones de corazones locos, (rotos) que se ahogan con el aire, y mi voz, los llena de orgullo y de pasión. Represento la emoción del primer beso, conozco la mentira, y el paso del tiempo, desconozco los motivos, y deseo tus sentimientos. Tantos, como imagines, tantos, como imágenes admires.
Enséñame lugares donde no haya números impares, y que no pares a pensar, si sienten lo mismo las paredes que protegen nuestro hogar, si la verdad es que te quiero, si mi problema es que a veces soy demasiado sincero, entre el cemento y el acero, se oye un chico sentado en la litera espera, que pase primavera, será cuando otra chica pegue a su puerta. La apariencia ya no importa, el lo soporta, y mientras las horas acortan su vida, la muerte pide paso, pero el deseo de enamorarse, le quita su descanso, para él, sin sonrisas y abrazos, y con la soledad en su camino, la existencia es un fracaso.
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¡Niños y niñas tienen el derecho inamovible a tener una infancia JUSTA&DIGNA!

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